EL MISTERIO DEL CASTILLO - CAPÍTULO 29

Lady decide romper el silencio.
-si, es mi hermano.
-no me importa que sea tu hermano, lo que me importa es que no te vuelvan a capturar.-contesta Alister mirando fijamente a Alexander.
Este al darse de cuenta de la mirada que Alister le echó, responde:
-yo no seré el que te la arrebate sino mi padre.
Dicho esto Alexander se acerca a Cliff y con un gesto, los dos salen hacia fuera, al descampado. Sady se queda sentada con Alister y Lady, hablando.
Afuera, Cliff y Alexander mantienen una conversación un tanto extraña…
-dime, Cliff, ¿ya sabes que harás?-pregunta Alexander en un tono irónico.
-si, pero antes tengo que regresar al pueblo donde nací.-contestó Cliff tocando su arma.
-así que volverás a las montañas diamantinas.-afirmó Alexander sabiendo que Cliff tendría que pasar por la fortaleza en la que había guerra, el desierto y un angosto pasaje por medio de las montañas. Al pasar todo eso lleno de peligros y bestias feroces, está el pueblo donde sus habitantes son famosos por los pasibles que son, pues conservan la calma ante todo.
Mientas tanto, dentro, Sady y Lady lograron convencer a Alister de que Lady estaba en perfecto estado. Alister seguía desconfiando, pues notaba que en Lady algo había despertado…
Alexander toca un hombro a Cliff y dice:
-vuelve vivo porque si alguien te mata quiero que esa persona sea yo. ¿Entendido?
-claramente, pero no podrás matarme.-dijo Cliff lleno de confianza.
Sady, Lady y Alister salieron y se encontraron con estos dos.
Sady no puede evitar la típica pregunta:
-¿Qué hacéis?
Entre una sonrisa Alexander responde con otra cuestión:
-Alister, ¿tu que harás?
Alister sabiendo que las chicas desconocían sus planes contestó:
-de momento volveré a mi pueblo natal, si Cliff descubre su origen, ¿porqué yo no?
Sady y Lady se observan sin saber que decir.
Cliff al ver que Sady lo miraba, decidió contar todo y una vez que ellas lo supieron, se negaron a dejarlos ir solos.
-no puedes irte así sin más, acabas de volver de entre los muertos, no quiero volver a perderte…-dice Sady sinceramente.
-Alister, ¿me dejaras ir contigo?, por favor.-preguntó Lady mirando a Alister con ternura.
Alexander, apoyado a la pared, esperaba la decisión de estos. Alexander al ser medio demonio igual que Lady, ya sabía que lo que ocurría con ella era que sus poderes latentes habían despertado. Ahora podría usar magia pero no siempre.
-De acuerdo, antes de nada decidiremos una ruta hasta la que seguiremos juntos, después, nos tendremos que separar pues las montañas diamantinas y el volcán oculto están en direcciones opuestas.
-dicho pues. Al llegar al desierto Alister y Lady se dirigirán al volcán oculto, en el este y Cliff con Sady a las montañas diamantinas, en el oeste. Yo averiguaré que trama la criatura en su laboratorio secreto.-dijo Alexander para aclarar que todos estaban de acuerdo en eso.
Se pusieron en marcha.
Cliff iba en cabeza junto con Alister, Sady y Lady atrás, hablaban de cómo harían para derrotar a Bladir.
Mientras, en el castillo, la criatura formulaba hechizos y mezclaba mejunjes raros…
Bladir en uno de sus libros encontró un mapamundi donde tenía marcado con cruces los reinos que habían sucumbido a su poder, con círculos los que tenían rebeldes y con una estrella los reinos que eran neutrales pero podían entrar en guerra o conflicto en cualquier momento. También se fijó en que en una de las estrellas estaba el pueblo dónde naciera Lady y en el que nació Alexander días antes…
A la mente de Bladir venían recuerdos de su infancia, junto con su padre, la paz reinaba y él junto con su joven esposa, vivían en un precioso castillo, el mismo en el que ahora vive. El cambio fue radical desde aquel incidente…
Bladir se levantó y de rodillas llorando dice:
-amada mía, volveré a recuperar nuestro reino.
De repente aparece la criatura…
-señor, levántese. Ya he terminado mis últimas creaciones. Los clones de Lady, Alexander y el mago ya están a punto, sólo los juntaré en un solo cuerpo masculino con el poder de los tres.
En apariencia será como Alexander cuando tenía once años, pero en realidad será una maquina de matar despiadada…-dice la criatura que no cabía en si del gozo de haber creado semejante monstruosidad.
El grupo llega a la fortaleza donde aun hay pequeñas escaramuzas donde los gargones y los soldados de la arena luchan encarnizadamente.
-muy bien, aquí no separamos.-dice Alexander a la vez que se da media vuelta y camina hacia el pueblo de nuevo.
-ahora solo tenemos que atravesar la fortaleza y…-dice Sady sin acabar la frase.
-… pasaremos aquí nuestra última noche juntos.- acaba la frase Alister.
-no es momento de depresiones, volveremos a vernos.-dice Cliff clavando la espada en el suelo y a su lado, tumbándose el.
-chicos, esta vez será la última vez que nos separaremos. Si alguna vez nos perdemos, tan solo debéis saber que en nuestros corazones siempre hay un lugar para que estemos juntos.-dice Lady sentimentalmente.
Los cuatro amigos se miran y sonríen al mismo tiempo se acuestan con sus parejas y poco a poco los párpados les pesan.
Alexander a lo lejos emprende la búsqueda de la criatura y su laboratorio secreto, pero antes pasaría la noche en la posada…

Javi
Galicia - España