EL FORJADOR DE HISTORIAS

¿Habéis visto nunca cómo se crea una espada? Se coge, se calienta y se moldea a base de golpes de martillo. Todas las espadas son forjadas al igual que las historias. Las historias no nacen solas, hay alguien que las forja, que las crea. Y ese soy yo: El forjador de historias.

Vivo allí dónde no llega el ojo humano, veo aquello que no ve el ojo humano. Trabajo en mi cueva oscura, dónde si entras solo verás mi silueta forjando historias. Golpe tras golpe verás saltar las chispas del papel de piedra.
Pongo el papel en el horno de fuego fatuo y cuando está al rojo vivo lo saco. Entonces empiezo a picar y a forjar la historia. Lo hago hora tras hora, día tras día, sin descanso.

He visto tanto… no hay nadie ni nada que pueda enseñarme algo que no haya visto. Sócrates dijo: Sólo se que no se nada. Yo tal vez podría decir: Sólo se que lo he visto todo. Puede ser que me equivoque, pero estoy bastante seguro de que no.

Día tras días, año tras año, siglo tras siglo cojo mi martillo metalizado bañado en oro y empiezo a trabajar.

Con mi martillo forjo las historias que van surgiendo en todos los sitios de la tierra. Las historias más bellas, más humildes, más fantásticas. He visto tantas lágrimas derramadas, tantos bellos momentos. Pero también hay una cara oscura. La cara del asesinato, el odio, la amargura, el desastre. He visto vidas hundirse por un corazón roto. Personas llegar a lo más alto para luego suicidarse. Personas que dedicaban su vida para ayudar a los demás para luego ser traicionadas. Personas que han dado su vida, personas que han ayudado, que han llorado por otros.

Lo he visto todo

A todas esas historias podría darles bellos consejos. Cada vez que mi martillo tiene que forjar la historia de un desastre, de un asesinato o una muerte, yo lloro, mis lágrimas son derramadas. No puedo soportar las malas historias pero a través de los siglos he aprendido a convivir con ello.

Desde que existe la humanidad he existido yo. He visto a Reyes conquistar grandes extensiones de territorio. Pasarse la vida luchando para luego morir y dejarlo todo como estaba.

He visualizado tanta sangre derramada y naciones exterminadas por el simple afán de “poder”. La ira, el egoísmo, la avaricia, todo ello en estado puro y en su máxima expresión.

Cojo mi martillo y empieza a picar. Encima de una papel de piedra especial. Un papel que representa el corazón de la persona. Es allí donde se forja la historia. Con cada golpe voy forjando su historia. Se va desvelando el odio, la ira, pero también el amor, la felicidad… Con cada golpe veo más, veo todo lo que la persona ha sufrido y ha pasado. Esas personas creen que nadie las comprende.
Pero yo las comprendo, a todas y cada una de ellas. Mientras forjo su historia los entiendo tanto como si fuera ellos.

Y por fin, cuando termino de forjar. Allí es dónde se acaba, se acaba la historia de su vida. Historias tristes... Pero también he podido sonreír cuando he visto terminar la vida de grandes asesinos, piratas y otros seres que se contentaban con destruir y matar.

Tengo mucho que contar y explicar. La próxima vez que vean mis palabras escritas será para contar las historias más bellas, trágicas, fantásticas e increíbles que hayan podido escuchar jamás. Reales todas ellas.

Cada vez que pase algo en sus vidas no piensen que no hay nadie que les comprenda. Pues detrás de ustedes, estoy yo, forjándoles su historia y su destino.

Escrito por: Jack The Ripper